sábado, 19 de mayo de 2012

La Bombonera es una cancha hermosa 1994


13 de octubre de 1994, Bombonera. Boca recibió a River por los cuartos de final revancha de la Supercopa. Tras el empate 1 a 1 y la definición por penales que clasificó a Boca y eliminó al equipo millonario, los festejos desatados por la Mitad más Uno fueron interminables.
Y entre tanta fiesta, antes de retirarse a sus casas, hablaron los protagonistas. La mayoría hizo referencia al partido recién disputado, a excepción de Enzo Francescoli. El uruguayo, como era la primera vez que jugaba en la Bombonera, no ahorró elogios para nuestra cancha. Si cuando dijo que “los hinchas de River eran muy pelotudos” dudamos en darle la razón, en esta oportunidad le tenemos que dar la derecha al Príncipe con los ojos cerrados.
La Bombonera es una cancha hermosa. Es una cancha con mística, con magia, con hazañas sobre el lomo. Es una cancha que inspira temor, respeto y, como vemos, admiración en extraños y hasta en rivales.
Fuente: diario Clarín correspondiente al 14 de octubre de 1994.